lunes, 28 de enero de 2008

El faro de mi vida: Un momento para la magia, la ilusión Un momento para creer en las hadas Sin magia,sin ilusión,sin amor, la vida,no lo es

Y me llevo enredado en el alma
tu recuerdo...

A veces,
se me viste de luna,
me sonríe a lo lejos,
ilumina con su franja de luz
la mar de mis ensueños.

Y me llevo enredadas en la piel
las manos tuyas...

A veces,
se me visten de mar,
me acarician lentamente la piel,
me suben poco a poco,
me rozan las caderas
hasta inundarme entera
de caricias de sal

Y me llevo enredadas en los oídos
tus palabras...

A veces,
están hechas de versos,
a veces,
son silenciosas,
y otras veces...
se visten de fiesta
para llenarme el alma

Y llevo enredada en los ojos
una mirada tuya
que me viste de beso

En toda vida es necesario un faro...

Basta un sentimiento
que habita en nuestra alma

Basta haber acercado mi piel a tu piel

Basta lo que queda dicho en un beso...

para haber encontrado ese faro necesario en la vida

Son ráfagas,sólo ráfagas de luz
y sin embargo...
ya ves,
las llevo enredadas en la piel y en el alma

Son ráfagas,sólo ráfagas de luz
y sin embargo...
son suficientes para alumbrar el camino
y fueron suficientes
para encontrar el puerto
donde atracar mi alma

A tí...
mi faro,
en esta mar de vida

sábado, 19 de enero de 2008

Mensaje en una botella tirada al mar eterno de un enamorado.


Quizás sigo esperándote, eres un ente que soy incapaz de borrar. Tu cara, tu mirada, tu sonrisa se han desdibujado de mi mente, pero sigo esclavo de tu recuerdo y encadenado a no olvidarte.
Te fuiste a un viaje a la nada y desapareciste de mi vida, tengo la esperanza que me llamarás e iré a buscarte, porque te guardo mi amor.
Recuerdo tu primer beso, tu mirada me cautivó. Desde entonces he visto muchas pero ninguna igual.
No sé si he hecho bien, quizás no te he vuelto a llamar porque tengo miedo a que no descuelgues, mejor dejarlo así, mejor vivir de este bonito recuerdo
Cada vez que paso por aquel aeropuerto recuerdo como te perdía por aquella puerta de embarque. Mi experiencia de espectador más traumática. Aquel sonido que te invitaba a abandonar, ha sido mi peor condena. Sueños perdidos, sueños rotos.
Recuerdo tu voz, la de la última llamada, rota, porque sabías que aquel cuento de hadas tenía aquel final trágico.
Quizás no te he vuelto a decir que te quiero porque sé que todo acabó. No he luchado en esta lucha de titanes porque sabía que te había perdido para siempre, y he sido muy cobarde.
Yo sé que nunca te llegará esta carta porque no tiene ni destinatario ni remitente. Será una carta que caerá en el olvido, encerrada en una botella en el mi mar eterno, que morirá en el pasado y el tiempo la destruirá.